Quién no conoce a estas alturas la famosísima disputa que mantuvieron Newton y Leibniz sobre la autoría de la invención del Cálculo. Es un tema muy conocido que desde que comenzó, en la segunda mitad del siglo XVII, ha sido motivo de enfrentamiento entre los seguidores de ambos contendientes. Aunque en este blog ya hemos hablado de que Fermat debía tener un lugar privilegiado en este asunto, la Historia ha dejado a estos dos brillantes matemáticos como los inventores y primeros desarrolladores de lo que hoy conocemos como Cálculo Diferencial y Cálculo Integral.

El análisis de los textos que se conservaban de aquella época, incluyendo la correspondencia entre ellos mismos y con otros matemáticos, dejaba más o menos clara la historia. Por resumir un poco, se sabe que los dos desarrollaron el Cálculo de forma independiente. Fue Newton quien lo hizo antes, pero fue Leibniz quien lo publicó primero. Contando con que Newton y Leibniz hablaron sobre ello en su correspondencia antes de que este último publicara, la disputa era de esperar. Hubo acusaciones de plagio entre ellos, adeptos de los dos que los defendían a muerte atacando al contrario, en general hubo una trifulca entre Inglaterra (Newton) y Alemania (Leibniz) en la que se luchaba por quedarse con la autoría de la invención de esta importantísima rama de las matemáticas. Aquí podéis ver un resumen un poco más amplio de lo que la Historia nos había contado hasta ahora.

Y digo hasta ahora porque parece que la realidad no fue del todo como la contaba la Historia hasta hace nada. Todo ello se aclara en el artículo When Lions Battle, que escribió Nicholas Tasaday (de la Piltdown University) para Math Horizons, de la MAA.

Isaac Newton (izquierda) y Gottfried Wilhelm Leibniz (derecha)

La cuestión es que hace pocos años, en 2007 concretamente, se encontraron algunas cartas recibidas por Newton que no se conocían hasta la fecha. El remitente principal de estas cartas era Leibniz, habiendo también dos que fueron escritas por Johann Bernoulli. Esta correspondencia revela que esta disputa entre Newton y Leibniz por la invención del Cálculo fue en principio una estrategia ideada por ellos mismos, que comenzó por parte de Newton como un plan para vengarse de Johann Bernoulli (a quien Leibniz califica como mediocre mind en una de las cartas) por no hacer público que la autoría de la resolución del problema de la cadena colgante correspondía a Newton. Todos los detalles de la misma, así como los extractos fundamentales de las nuevas cartas, se puede consultar en When Lions Battle, el artículo de Tasaday que comentaba antes. Pero para abrir boca os dejo una captura de pantalla de una de las partes clave de este artículo:

Si duda este descubrimiento supone un cambio inesperado en uno de los episodios más rocambolescos de la Historia de las Matemáticas, añadiéndole un tinte ciertamente morboso, si no tenía ya suficiente. Os recomiendo que leáis el artículo con calma y tranquilidad para poder comprender así los entresijos de la guerra Newton-Leibniz después de añadir a la Historia estos importantísimos documentos.


Actualización (29-12-2011): Como varios habéis apuntado en los comentarios, la información contenida en este post no es cierta. El post es una broma, una de las muchas que seguro habréis leído por ahí este 28 de diciembre, Día de los Inocentes.

¿Cómo podríamos haberlo intuido sin necesidad de saber nada sobre el tema del que se habla en el artículo? Pues por el nombre de quien escribía el paper al que me refiero en él, Nicholas Tasaday, y por su universidad, la Piltdown University. Espero que os haya gustado el post.

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