Hace unos días publicábamos un artículo sobre el grupo Bourbaki en el que se hablaba de sus comienzos, sus fundadores, la labor que realizaron…y la historia sobre su nombre. En él comentábamos que se denominaban Nicolas Bourbaki por una especie de broma…o al menos eso es lo que nos hicieron creer.

En este artículo vamos a contar la que parece ser la gran verdad sobre Nicolas Bourbaki.

En uno de mis últimos viajes he estado por la capital de España realizando unas gestiones. Generalmente no me suele dar tiempo a más que a lo que realmente voy a hacer, pero esta vez tuve ocasión de tener una charla con un investigador amigo mío que en esta ocasión también se encontraba en Madrid.

En ese (siempre corto) intervalo de tiempo que pudimos compartir aparecieron muchos temas relacionados con las matemáticas: se habló de mi blog, de la educación matemática en España, de cómo reacciona el ciudadano medio ante esta ciencia, de la situación en la que se encuentra la investigación matemática en España…Y bueno, no os voy a engañar, el tema estrella de este diálogo pertenece al este último campo, hecho que comprenderéis enseguida.

Mi amigo (me ha dejado contar esta impactante noticia, pero me ha pedido que su nombre no figure al no tener todavía las pruebas físicas en su poder) me contó algo sobre un tema que seguro que traerá consigo un cambio radical en la manera en la que vemos al grupo Nicolas Bourbaki.

La cuestión es que en el transcurso de sus investigaciones este amigo mío colabora con matemáticos de varias partes del mundo: estadounidenses, japoneses, indios, franceses…Uno de estos últimos es, digamos, el protagonista de esta historia. Este matemático francés se encontraba hace unos meses realizando un cierto estudio sobre ciertos temas que no vienen al caso. La cuestión es que, encontrándose en un cierto momento en la Biblioteca Nacional de Francia, sacó un libro de su posición habitual en la estantería y observó que debajo de él parecía como si el tacto de la madera fuera distinto al resto de la estantería. Posiblemente llevado por la curiosidad que todo ser humano posee, golpeó ligeramente con un dedo ese pequeño trozo de madera, y al darse cuenta de que el sonido era extraño (como hueco) decidió indagar más (deformación profesional supongo, los investigadores son así). El caso es que consiguió levantar ese pequeño trozo de madera, encontrando debajo de él unos papeles con pinta de tener muchos años. Un rápido vistazo le llevó a observar que estos papeles resultaron ser un manuscrito fechado en 1935.

En principio nuestro colega francés no esperaba encontrar nada especial, pero evidentemente comenzó a leerlo. Puedo imaginar cómo iba cambiando la expresión de su rostro a medida que iba devorando las palabras de dicho escrito. Hoy puedo contaros, en rigurosa exclusiva, cuál era el contenido de este manuscrito.

Los papeles encontrados, firmados en su primera página por HC, JD y AW (suponemos que estas siglas se referirán a Henri Cartan, Jean Dieudonné y André Weil, tres de los supuestos fundadores del grupo) contenían un texto que con total seguridad cambiará totalmente la visión que tenemos en la actualidad sobre el grupo Bourbaki. En el post que publicábamos hace unos días (enlazado al principio de esta entrada) se hablaba de que el nombre del grupo provenía de una especie de broma que sufrieron varios de los fundadores. Al parecer esto es rigurosamente falso. La realidad es la que se cuenta en el siguiente párrafo.

Manuscrito de HC, JD y AWEl general Charles Denis Bourbaki existió en realidad. Lo que no se sabía hasta la aparición de este escrito es que tuvo varios hijos, uno de los cuales tuvo a su vez un único hijo llamado Nicolas. Éste último tuvo otro hijo, al que bautizó con su mismo nombre. Este Nicolas Bourbaki es el protagonista de nuestra historia. El Nicolas Bourbaki del que hablamos gozó de una educación bastante completa en muchos ámbitos, excepto en matemáticas. Según reza el escrito encontrado, Nicolas Bourbaki tuvo unos profesores de matemáticas bastante malos. Tanto que, a pesar de su aparente innato interés por esta ciencia, el pequeño Nicolas siempre tuvo un nivel en matemáticas mucho más bajo de lo que él mismo hubiera deseado. El caso es que, a pesar de esto, no le fue nada mal en su vida. Ciertos negocios interesantes le colocaron en una situación privilegiada en la sociedad francesa. Ello le permitió dedicarse a buscar la manera de aprender matemáticas de una forma mínimamente decente. Pero no lo consiguió en primera instancia. Nicolas ya contaba con una cierta edad y recorrer en ese momento el camino matemático que no pudo siquiera comenzar en su juventud se tornaba cada vez más como una tarea realmente difícil. El cariz que estaba tomando el asunto le llevó a Nicolas a tomar una decisión drástica: reclutar a los mejores matemáticos franceses del momento y ponerlos a su servicio. Aunque todavía no tengo todos los detalles del escrito, dispongo de la imagen que podéis ver a la derecha (en la que se ha ocultado el contenido, ya que todavía no se ha hecho público) y de algunos datos sobre la historia.

Nicolas inventó el tema de la falsa conferencia de Raoul Husson, de la que hablábamos en el artículo anterior sobre Bourbaki, para ocultar las verdaderas razones de la creación del grupo (en realidad Raoul es un personaje ficticio) y obligó a los fundadores del grupo a que trabajaran para él, llegando en ciertos momentos a rozar la esclavitud. Los miembros iniciales dedicaban día y noche a estructurar las matemáticas de forma que Nicolas pudiera entenderlas. Por eso comenzaron desde cero, dando rigor a los fundamentos de las matemáticas. El trabajo diario era supervisado por Nicolas y vigilado por varios de sus secuaces. Además, Nicolas se preocupó de que ninguno de los matemáticos secuestrados revelara las verdaderas causas de sus reuniones mediante amenazas personales y familiares. Ésta debe ser la razón por la que esta historia no había llegado a nosotros hasta ahora (posiblemente los matemáticos que han sido miembros del grupo más adelante ni siquiera la conozcan). Y también la razón por la que HC, JD y AW escribieron este texto y lo escondieron de esta manera. Pero ahora ya la conocemos, ya sabemos la gran verdad sobre Nicolas Bourbaki.

Por ahora no tengo más información, esto es lo que sabemos a día de hoy. En el momento en el que tenga más datos sobre el tema seréis los primeros en saberlo. Os mantendré informados.


Actualización: Como no podía ser de otra forma, este post es una INOCENTADA propia de la fecha en la que ha sido publicado, el 28 de diciembre.

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